La tradición familiar en el cultivo y recolección de trufa negra se remonta al abuelo de la familia, quien fue pionero en la recolección de trufas silvestres en la zona de Gúdar-Javalambre. Hace más de 30 años, la familia inició el cultivo propio de trufa negra a partir de plantas micorrizadas, superando dificultades iniciales y consolidando una plantación que sigue creciendo y produciendo trufa de calidad. Actualmente, la empresa pertenece a la tercera generación dedicada a este sector.