La pasión y perseverancia de los antepasados de la familia, así como de sus sucesores, han permitido evolucionar el negocio desde la parada de pescado en la plaza de Vic (años 20), a un almacén de congelado pionero (años 50-60), la progresiva apertura de varias delegaciones (años 70-90) y hasta la actual empresa que somos actualmente, con gran potencia de importación y exportación en todo el mundo